Bloque 3_Comunicación Escrita: la escritura V0

 







La comunicación escrita es un aspecto fundamental que debe desarrollar el niño a lo largo de su vida escolar. No sólo porque así se requiera a nivel curricular en el ámbito de la asignatura de Lengua Española, sino porque va a necesitar utilizar esta habilidad en muchos aspectos académicos. Aprender a escribir no sólo significa aprender a codificar, sino que implica desarrollar habilidades de comunicación al igual que la comunicación oral. En el proceso de codificación, están implicadas las rutas fonológica y ortográfica. La ruta fonológica, activa la relación entre fonema (sonido de la letra) con el grafema (representación gráfica del fonema o letra escrita). Esta relación no involucra un conocimiento global de las palabras, sólo es una transcripción escrita de los sonidos de las letras verbalizadas. Por otro lado, la ruta ortográfica activa la palabra como un todo.

Una parte muy importante en este proceso de aprendizaje de comunicación escrita es que el mensaje que escribimos pueda ser decodificado por el lector. Es en este sentido donde la grafía cobra especial importancia. Una letra inteligible, o un escrito que no facilita su lectura (renglones torcidos, márgenes que no se respetan, etc) puede hacer muy complicada la lectura de un texto.

La grafomotricidad está relacionada con el control motor que tiene el niño asociado con la grafía. Cuando un niño tiene dificultades con la escritura y la grafomotricidad, puede tener:

-          Deficiencia en el tono muscular, lo que no le permite agarrar el lápiz con la suficiente fuerza para hacer los trazos continuos

-          Dificultad de coordinación visomotora (dificultad para sincronizar la información visual que percibe con los movimientos que ejecuta su mano

-          Deficiencias en la direccionalidad y ubicación espacial, lo que le dificulta ejecutar los trazos de las letras en el sentido correcto, así como situarse de forma ordenada dentro de la hoja de escritura (no visualiza ni respeta bien los márgenes, le cuesta escribir recto incluso sobre líneas guía, confunde la derecha con la izquierda, etc).

Este proceso se inicia de forma natural mucho antes de que sentemos a los niños en primaria con un lápiz y un papel. La grafomotricidad se materializa de manera incipiente en torno a los 2 años con los primeros garabatos y dibujos y va evolucionando a medida que el niño va madurando, haciéndose los trazos más finos e intencionados. Estas actividades de dibujo son muy importantes durante la etapa de infantil para que el niño llegue a primaria con fuerza en las manos, el puño y el antebrazo y a demás ayuda al niño a familiarizarse con los materiales que después tendrá que utilizar. En esta etapa el niño todavía no se ajusta a las normas de escritura, los márgenes, etc.

A partir de los 6 años el niño entra en una etapa de asimilación (operaciones concretas) y es normalmente cuando los niños comienzan a leer y escribir propiamente, ya que, hasta esta edad, pueden iniciarse en las letras o en algunas palabras, pero el proceso es muy inicial todavía. Hay niños que comienzan en 3º de Infantil, pero, dado que cada niño lleva su ritmo, es a lo largo de 1º de EP cuando la mayoría del grupo suele alcanzar este nivel.

 

2º EP (Niño con mala letra y errores en los trazados)

 

La disgrafía, es una dificultad específica de la escritura que se caracteriza por una dificultad de recuperación de las formas de las letras y las palabras. Es una dificultad funcional que no implica una deficiencia intelectual y por tanto podemos trabajar con el niño para que lo mejore. Habitualmente, en un niño de 7 años, lo más probable es que su disgrafía sea evolutiva, pero es importante estar en contacto con los padres para entender si el niño ha sufrido algún problema psicomotriz previamente.

Una parte muy importante como maestro es detectar esta dificultad y trabajarla con el niño sin que éste sea muy consciente de esta dificultad. Si lo hacemos muy evidente el niño puede retraerse en el proceso de escritura por vergüenza e inseguridad. Pero, por otro lado, para conseguir una mejoría es muy importante un entrenamiento diario por lo que tendremos que trabajar con el niño de manera muy individualizada y un buen aliado pueden ser los padres o tutores del niño por lo que en mi opinión deberían de estar 100% involucrados desde el principio.



De acuerdo con los psicólogos es importante que el niño conozca su dificultad por lo que lo primero que debemos de hacer es sentarnos con él para hablarlo. Es muy frecuente que proteste ante dictados, o ejercicios de escritura en general porque habitualmente saben de su dificultad. Por ello, quizá podríamos afrontar la conversación justo después de una actividad de escritura que hayamos hecho en clase de la siguiente manera:

Hola Juan, ¿te ha gustado la actividad que hemos hecho hoy? (probablemente conteste que no). ¿Por qué? Considero importante que el niño verbalice que se le da mal o que no le gusta porque no le sale bien. ¿Qué es lo que crees que puedes mejorar? ¿Te gustaría mejorarlo? Yo te voy a ayudar y lo vamos a hacer juntos.

Lo primero que podemos hacer, es cambiarle la hoja de cuadros que habitualmente utilizan en este curso por una de pauta doble. 




Le daremos estas hojas y le enseñaremos a escribir dentro de la pauta.




La pauta de cuadros puede resultar difícil para un niño que tenga problemas de orientación y de direccionalidad. Todos los cuadros parecen iguales, al principio les cuesta identificar bien la línea azul del margen, y les obliga a contar en todo momento. Por ello el uso de una pauta más sencilla puede ayudar al niño a encontrarse más seguro en las actividades cotidianas del aula, a la vez que le ayudará a trabajar la caligrafía al intentar trazar las letras dentro de las líneas. Podríamos utilizar una hoja de pauta sencilla si el problema que tiene el niño es que se tuerce, pero si además las letras son desiguales, la doble pauta le puede ayudar mejor a trazar las letras más homogéneas.  Por otro lado, en esta pauta no es necesario dejar el margen porque la pauta ya comienza donde podemos empezar y terminar de escribir por lo que el proceso le resultará más sencillo al niño. Progresivamente, podríamos ir quitándole la doble pauta, para pasarle a pauta única y finalmente a la hoja de cuadros a medida que vaya evolucionando.

Como actividad para casa, podríamos pedirle que ayude a su madre a hacer la lista de la compra los fines de semana. A diario, para que trabaje unos 5-10 minutos, podemos proponerles a los padres que, en casa a la entrada, pongan el tarro del agradecimiento. Consiste en poner un frasco de cristal en el que cada miembro de la familia por las noches escriba por lo que se siente afortunado. No lleva más de unos minutos escribirlo y es una actividad familiar que es muy divertida, sobre todo si un día a la semana se dedican unos minutos para leerlos en alto y comentarlos en familia. Con una actividad de este tipo el niño se sentiría motivado y con ganas para escribir todos los días unos minutos. No hace falta que sean grandes textos, pero sí es importante la constancia y la motivación. Al principio, para que haga un poco de caligrafía sin darse cuenta, podemos prepararle unas hojitas pequeñas con la pauta doble y con el principio de la frase punteada para que él la repase y luego continúe con lo que quiera escribir de manera libre, pero siguiendo el ejemplo de lo repasado al comienzo. Por ejemplo, podría estar punteado algo así como: Hoy me siento agradecido por … 

A medida que vayamos viendo que el niño mejora (lo veremos en el trabajo de clase), podemos darles a los padres papeles para el tarro con pauta doble, pero sin texto punteado para repasar, después pauta simple, y por último hoja de cuadros cuando ya lo esté utilizando en clase.

Para la lista de la compra, además de pedirle que colabore con sus padres el fin de semana, podemos pedirle que sea el responsable de apuntar en casa todo lo que falta. Para ello, podemos darle una hoja de pauta doble para que coloque en la nevera y cada vez que detecten en casa que falta algo, se lo digan a él como responsable para que lo apunte en la lista de la compra.

A nivel de evaluación, podemos ir evaluando su desarrollo en clase. En clase, para que no se sienta diferente, intentaremos motivarle, pero realizará el mismo trabajo que sus compañeros. Con el trabajo diario, y la pauta, conseguiremos que poco a poco vaya mejorando.

Una manera de motivarle es ir dándole privilegios a medida que vaya pasando de una pauta a otra, como por ejemplo algún tipo de responsabilidad en el aula. El premio final cuando llegue a escribir correctamente en la pauta de cuadros podría ser darle un bolígrafo para escribir, en lugar del lápiz, por ejemplo.

Para evaluar su evolución, utilizaremos la misma rúbrica en las diferentes pautas. Cuando llegue al nivel 3, le pasaremos a la siguiente pauta.

PAUTA

1

2

3

4

Doble

Letras desiguales y que se salen de la pauta

Letras desiguales, pero dentro de la pauta

Letras iguales y dentro de la pauta

 

Sencilla

Letras desiguales y que se salen de la pauta

Letras desiguales, pero dentro de la pauta

Letras iguales y dentro de la pauta

 

Cuadros

Letras desiguales. No cumple los márgenes. Se sale de las líneas

Letras desiguales. No cumple los márgenes, pero respeta las líneas.

Letras iguales, cumple márgenes, pero a veces se sale de las líneas

Letras iguales, cumple márgenes y respeta las líneas

 

Podríamos incluso darle al niño esta rúbrica para ir revisándola con él y que sepa de entrada lo que vamos a trabajar y cómo al final conseguirá su objetivo. De hecho, cada vez que consiga terminar una pauta, podemos darle un carnet con un animalito: pulpo (pauta doble), liebre (pauta sencilla) y león (pauta cuadros).

4º EP (Niño con mala letra y errores en los trazados)

A nivel de desarrollo evolutivo, los niños a partir de los 9 años los niños alcanzan la maduración nerviosa lo que favorece una mejora en su motricidad fina y gruesa: los movimientos se vuelven más finos y precisos. Esta evolución de sus habilidades motrices se ve reflejada en el proceso de escritura. A lo largo de este curso, es habitual que la letra evolucione y el alumno vaya ganando soltura en el proceso de escritura. Pero cada niño tiene su ritmo y todavía puede haber algún niño que tenga dificultades con los márgenes, con mantener la escritura recta, o simplemente, que la escritura no sea muy legible porque tenga problemas con el trazado de algunas letras. Es cierto que habitualmente en los colegios en primaria, se les pide escribir con letra entrelazada y este tipo de letra resulta a veces más difícil para los niños que las letras sueltas.

Lo primero que podemos hacer si tenemos un niño que tiene mala letra, y errores en los trazados es identificar si este problema viene por problemas de fuerza, de la forma de agarrar el lápiz, por una falta de concentración, etc. Los motivos de estos errores de trazado pueden ser muy distintos y detectarlo nos ayudará a definir mejor el tipo de actividades que podemos hacer con él para ayudarle y nos permitirá descartar que el niño pueda tener algún problema mayor. En ocasiones, el problema viene derivado de una mala sujeción del lápiz y en general de una mala postura a la hora de escribir. Esto provoca en el niño un mayor cansancio al escribir ya que le supone más esfuerzo, lo que a su vez le genera cierto retraimiento y desgana a la hora de ponerse a escribir o enfrentarse a cualquier actividad que lo requiera. Durante 4º de EP el nivel de exigencia en escritura suele intensificarse frente a los cursos previos por lo que puede que el niño no haya dado señales tan claras previamente y venga con “vicios” posturales de los primeros años de primaria.

Al igual que veíamos con el niño de 2º de primaria, lo más importante es sentarnos con el niño y explorar cómo se siente ante las actividades de escritura y motivarle para que trabaje en mejorar su letra. Podemos corregirle la postura de agarre del lápiz y explicarle que, aunque le cueste un poco al principio, va a notar mucha mejoría después y menos cansancio. Trabajar con plastilina por ejemplo, le puede ayudar mucho a mejorar la fuerza en los dedos.

Si el problema está más relacionado con el respecto por los márgenes, podemos utilizar laberintos que puede seguir con los lápices y que le ayudarán a mejorar la motricidad fina practicando de forma lúdica el trazado entre las líneas. Podríamos pedirle que haga sopas de letras con poco espacio entre las letras y cuando encuentre las palabras, intente rodearlas sin tocar las letras de alrededor.

Para los problemas de trazado, podemos trabajar con él un cuento en caligrafía. Esta actividad puede ser útil para que la realice en casa. Cada día le damos un trocito del cuento escrito con letra punteada y con baja intensidad de impresión. Para que pueda leer la historia, le pediremos que la repase con el lápiz para que le sea más fácil leerlo. Puede ser un cuento, o una historia que nos inventemos, lo importante es que el fragmento que le demos cada día, le vaya generando ganas de seguir leyendo para que no vea el ejercicio como algo rutinario. A medida que vaya mejorando en la letra, podemos ir quitándole letras de la caligrafía para que él las vaya generando solo. Incluso, podemos pedirle que al final del fragmento del día, escriba él una o dos frases de cómo cree que puede que siga la historia.

Para evaluar la escritura del niño a lo largo del proceso, podemos utilizar la siguiente rúbrica:

 

 

 

 

1

2

3

Márgenes

No respeta los márgenes nunca

Respeta los márgenes a veces

Respeta los márgenes siempre

Escribe recto

Le cuesta seguir las líneas rectas siempre

En ocasiones le cuesta seguir las líneas de las cuadrículas

Consigue escribir sobre la línea recta siempre

Trazado

Las letras son desiguales en tamaño y no se entienden

Las letras son desiguales, pero se entienden

Las letras son homogéneas y con buena legibilidad

 

 

 

6º EP (Niño con mala letra y errores en los trazados)

6º es un curso de preparación de los niños para la ESO. En 1º de la ESO ya deben tener soltura en la escritura y cierta velocidad, ya que comienzan a tomar los primeros apuntes. Por tanto, si un niño llega a 6º con errores de trazado y mala letra, es muy importante explicarle que tiene que mejorarlo durante el curso porque sino en 1º de la ESO le será muy difícil seguir el ritmo. Los niños de 12 años ya están en la fase de la adolescencia temprana. Tienen una mayor capacidad de abstracción por lo que no será tan frecuente que el niño tenga problemas para mantener los márgenes o escribir recto. A esta edad pueden empezar a escribir en folio y para ello es útil que tengan una plantilla de líneas para situar debajo del folio lo que les ayudará a escribir recto. En la plantilla podemos además marcarles los márgenes también para ayudarles a que vayan acostumbrándose a escribir de forma estructurada en folios en blanco.

A nivel de actividades, con alumnos de esta edad podríamos pedirles que se conviertan en periodistas. Les podemos pedir que lleven con ellos una libreta y un bolígrafo y escriban en ella al final del día las cosas que les han llamado la atención durante el día y que creen que pueden ser noticia para el resto de la clase. Puede ser una noticia que han oído en la radio por la mañana en el coche, o bien algo que han visto en la calle, algo que ha pasado por el colegio, etc. La idea es pedirles que escriban todos los días unas frases que les ayude a recordar lo que quieren contar al día siguiente en clase a sus compañeros. Podemos preparar un pequeño espacio de 5 minutos al comienzo del día para que el periodista les de el titular del día. Esta actividad puede ayudarle a mejorar su autoestima y a trabajar un refuerzo positivo relacionado con la escritura.

En clase, podemos pedirle que escriba los enunciados de los ejercicios que realice en las diferentes asignaturas (esto lo podemos hacer con toda la clase para integrar al alumno y que no se sienta diferente, ni más torpe que los demás), tanto en clase como en casa con los deberes.

En este caso, tendremos que pedirle que tenga especial cuidado con lo que habitualmente le cuesta. Podemos acercarnos mientras está escribiendo y animarle si le vemos esforzándose con una sonrisa y un asentimiento, o intentar recordarle que se fije en los márgenes o en el trazado de alguna letra si es en lo que está fallando.

Es muy probable que en 6ºEP ya utilicen todos el bolígrafo para escribir. Si la legibilidad es mala y se siente inseguro, volver al lápiz le haría sentir mal y lo vería como un fracaso, por lo que podemos facilitarle que escriba con un bolígrafo de los que se borra si esto puede ayudarle a que se sienta más seguro.

Podríamos tener unas sesiones con él (una vez al mes, más o menos) en las que juntos evaluemos sus progresos para que él vaya siendo consciente de todo lo que mejora. Para ello podemos utilizar una rúbrica que le permita ir viendo su progreso en los diferentes aspectos.

 

1

2

3

Márgenes

No respeta los márgenes nunca

Respeta los márgenes a veces

Respeta los márgenes siempre

Escribe recto

Le cuesta seguir las líneas rectas siempre

En ocasiones le cuesta seguir las líneas de las cuadrículas

Consigue escribir sobre la línea recta siempre

Trazado

Las letras son desiguales en tamaño y no se entienden

Las letras son desiguales, pero se entienden

Las letras son homogéneas y con buena legibilidad

 

Trabajar con él esta rúbrica nos puede dar una buena oportunidad no sólo de objetivar su progreso, sino que sería una buena oportunidad para sacar textos suyos de principio de curso y textos actuales para que él mismo vaya viendo su progreso y se sienta motivado para seguir esforzándose.

 

 

Bibliografía:

 

-          Apuntes de la Asignatura

-          Blog Lecto-Escritura. https://lecto-escritura.es/etapas-de-maduracion-grafomotriz

-          López Peces, M. (2016), Disgrafía y disortografía: diagnóstico y tratamiento en alumnos de 2º EP, TFG dirigido por Crespo López, M.

https://repositorio.unican.es/xmlui/bitstream/handle/10902/8728/LopezPecesMirian.pdf

-          Blog Psicodiagnosis. Entrada 21 de Marzo 2021. https://psicodiagnosis.es/areageneral/consultas-habituales/nios-que-les-cuesta-escribir/index.php

-          Web del maestro

http://webdelmaestro.com/ejercicios-de-caligrafia-y-ortografia/

-          Campus Educación

https://www.campuseducacion.com/cursodemo/ludicasU01_A05.html

-          Understood Org

https://www.understood.org/es-mx/school-learning/partnering-with-childs-school/instructional-strategies/6-multisensory-techniques-for-teaching-handwriting

-          Etapas del desarrollo evolutivo. Escuelas de Familia Moderna. Modelo de Desarrollo Económico de Navarra

https://www.educacion.navarra.es/documents/27590/51352/BLOQUE+II+ETAPAS+DESARROLLO+EVOLUTIVO+%2811-14+A%C3%91OS%29.pdf/b6f58e34-ee1b-4539-a920-b9d492143323


Comentarios

  1. Las actividades son motivadoras pero, si no hay modelos, la escritura no se reeducará. El no respetar los márgenes suele ser más un error de comprensión que de caligrafía. Te has complicado mucho. Se trata, simplemente, de realizar un entrenamiento mecánico breve y diario hasta que la caligrafía (la mecánica del trazado) mejore y, para ello, aportar el modelo es imprescindible. Pueden ser textos sobre un tema que interese al niño, pero has de preparar las fichas o planas para que los niños realicen la tarea. Cuando copiamos de un libro (letra de imprenta), por ejemplo, solo copiamos el contenido, pero no la forma de las letras (letra manuscrita) que es el objetivo de esta actividad. Y si los niños no escriben bien, seguirán cometiendo los mismos errores. Debes buscar modelos de tipografías en dafont.com (por ejemplo) para cada curso y argumentar tus elecciones.

    Revisa lo que dice el tema sobre "calcar" las letras.

    Ten en cuenta que el niño de 2º debería utilizar el mismo tipo de letra con el que ha aprendido (ligada o desligada). El de 4º necesita reajustarse después de cambiar el útil (de lápiz a bolígrafo) o puede que ya esté tratando de personalizar su letra, lo mismo que el de 6º.

    Además de las argumentaciones para convencer a los niños de que deben entrenar para mejorar su caligrafía, simplemente di, en cada caso: qué tipo de papel, qué útil de escritura, qué tipografía (enlázala desde Dafont.com, por ejemplo) y qué tipo de frases/texto copiará el niño (pon al menos un ejemplo).

    Ten en cuenta que la rutina ha de ser diaria (de lunes a viernes) y dedicarle muy poco tiempo (unos 10 minutos es ideal). Y también deben hacerla en casa por dos motivos:
    - para no poner al niño en evidencia delante de sus compañeros
    - para convertir el resultado del entrenamiento en un reto personal, no escolar. Cuando seas maestra, verás que todos los niños se enfrentan a destrezas que se les dan peor que otras y peor que a la mayoría. Hablo de destrezas, no de contenidos conceptuales o de materias): caligrafía, lectura silenciosa, lectura oral, expresión oral... pero también cálculo, dibujo, actividades físicas, etc) Puedes negociar con cada uno de los niños el entrenamiento personal de estas destrezas y mostrarles que, cuando queremos hacer algo mejor, tenemos que entrenarlo.

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